El rector de la Universidad Nacional de Chaco Austral (UNCAUS), Germán Oestmann, fue procesado por corrupción y fraude a la Administración Pública. La causa relacionada con el desvío de fondos del Estado destinados a la institución que dirigía. El juez federal Aldo Alurralde dictaminó este procesamiento, acusando a Oestmann de participar en una asociación ilícita. Y la cual habría buscado transferir recursos a fundaciones y empresas vinculadas a sus familiares y allegados.

La investigación reveló la triangulación de fondos mediante transferencias entre diferentes organizaciones. Incluyendo fundaciones y empresas que estaban bajo el control de personas cercanas a Oestmann. Se destacó que muchas de estas operaciones carecían de respaldos administrativos adecuados o eran deficientes, con auditorías de balances realizadas por contadores de otras entidades vinculadas, lo que generaba un contralor recíproco.

Además de Oestmann, otros 17 empresarios, directivos y empleados de la universidad fueron procesados por su participación en esta red de corrupción, que también involucraba actividades de lavado de dinero. El juez también les atribuyó delitos como malversación de caudales públicos, abuso de autoridad y violación a los deberes de funcionarios públicos.

La resolución del juez incluyó un embargo de 100 millones de pesos para cada uno de los procesados. Así como la prohibición de salir del país y la obligación de presentarse mensualmente ante el Juzgado Federal como parte de sus obligaciones legales.