En febrero de 2024, tras la actualización del impuesto interno en enero, los precios de los automóviles nuevos en Argentina experimentaron ajustes, con valores que oscilan entre el 8% y el 30%. Las marcas ajustaron los precios según la nueva base imponible. Y cuentan con un piso estimado por encima de los $16 millones para algunos modelos específicos. A pesar de la variabilidad en los ajustes, en promedio, los vehículos cuestan entre $18 y $19 millones.

Dos excepciones en el mercado son Toyota, que aún ofrece el modelo discontinuado Etios, y Ford. Que ha decidido concentrarse solo en SUV, pick-ups y furgones. El Etios se mantiene como la opción más accesible, con el Etios Aibo siendo el auto más barato del mercado, cotizado en $13.225.000, y otras versiones que varían hasta $17,6 millones. Sin embargo, la disponibilidad es limitada y los precios pueden superar los $17 millones debido a la alta demanda.

Otras opciones «accesibles» son los modelos Joy y Joy Plus de Chevrolet, las versiones antiguas del Onix, y el Polo Track 1st Edition de Volkswagen, todos con precios alrededor de los $15,6 a $16 millones. El Yaris de Toyota, sucesor del Etios, también se encuentra en este rango de precios. Sin embargo, la disponibilidad es baja debido a restricciones de importación.

Precios de marcas líderes en ventas

A medida que se superan los $17,5 millones, se encuentran modelos de marcas líderes en ventas. Entre ellos, el Citroën C3 PureTech, el Onix Plus 1.2 LT, el Peugeot 208 New Like 1.2, el Renault Sandero Life 1.6, el Fiat Cronos Like 1.3 GSE, el Volkswagen Polo Track MSI y el Nissan Versa Sense 1.6. Estos modelos oscilan entre los $18,4 y $20,4 millones.

Aunque las listas de precios indican ciertos valores, la realidad en los concesionarios muestra escasez de modelos por debajo de los $18 millones. Las marcas nacionales como Renault, Fiat y Peugeot ofrecen entregas rápidas y bonificaciones. Lo que ha contribuido a que modelos como el Fiat Cronos hayan tenido un notable desempeño en las ventas en enero. La situación podría normalizarse entre marzo y abril en Argentina, cuando los autos importados de Brasil lleguen a las concesionarias.