Golpe al sindicalismo: Capital Humano homologó un acuerdo muy por debajo de lo requerido inicialmente por Camioneros
La Secretaría de Trabajo, a cargo del Ministerio de Capital Humano dirigido por Sandra Pettovello, ratificó este viernes el acuerdo paritario alcanzado entre el sindicato de Camioneros, liderado por Hugo Moyano, y los empresarios del sector del transporte de cargas. Sin embargo, el acuerdo homologado representa una pérdida considerable de poder para Moyano, dado que la suba salarial acordada fue de solo el 5,5% trimestral, muy por debajo de las exigencias del gremio, que inicialmente solicitaba un aumento mensual del 5,5% y, tras su rechazo, un incremento trimestral del 8,5%.
El acuerdo ahora aprobado por el Gobierno se estructura en un incremento escalonado de 2,2% en diciembre, 1,8% en enero y 1,5% en febrero. A ello se suma un bono extraordinario de $600.000 que se pagará en cuatro cuotas. Este acuerdo, aunque representativo para los trabajadores del sector, es un claro ejemplo de cómo el Gobierno de Javier Milei está tomando el control de la economía y, a su vez, reduciendo el poder de los sindicatos aliados al kirchnerismo, como el de Moyano, que en los últimos años ha sido una de las fuerzas sindicales más influyentes en el país.
El golpe para Moyano y los sindicatos kirchneristas
Moyano había intentado presionar por una paritaria mucho más alta, alineada con los elevados índices de inflación que suelen manejar las consultoras, pero el Gobierno se mantuvo firme en su postura. Las demandas de Moyano y de otros sectores sindicales kirchneristas se toparon con una clara oposición por parte del Ejecutivo, que rechazó un incremento que consideraba insostenible desde el punto de vista económico.
El rechazo no solo refuerza la postura de Milei en su lucha contra la inflación, sino que también actúa como un mensaje claro hacia los sindicatos de izquierda y kirchneristas: el control económico debe ser responsable y no puede estar sometido a las demandas de un sector sindical que históricamente ha operado como una de las bases de poder del kirchnerismo.