Con la presencia de la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, y el gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, se dio inicio ayer a la construcción del alambrado en la frontera entre Argentina y Bolivia. Se trata del límite norte en la localidad de Aguas Blancas con Bermejo (Bolivia). Tras la polémica iniciada días atrás por esta medida, la funcionaria nacional se hizo presente para colocar el primer poste de cerco que separará ambos territorios con el objetivo de brindar seguridad y mayor control fronterizo. Los funcionarios aprovecharon la oportunidad para entregar equipamiento a Gendarmería Nacional e inaugurar un Sitio Seguro para Víctimas de Trata.

El cerco tendrá una extensión de 200 metros y estará hecho a base de pilares de cemento y alambres de púa. El mismo será construido en el marco del Plan Güemes. Tendrá por objetivo evitar el contrabando y el ingreso y salida ilegal de personas de los dos países vecinos. De este modo, se podrá encauzar el control fronterizo y evitar así delitos como el narcotráfico y la trata. Por otro lado, la base de Gendarmería de Aguas Blancas, tendrá a partir de ahora equipamiento de reconocimiento biométrico de personas. Finalmente, quedó inaugurado un Sitio Seguro para Víctimas de Trata, que funcionará en la Oficina de Migraciones Puerto Chalanas.

Hay muchísimos puntos ciegos en la frontera. Se trata de cuidar especialmente a quienes son víctimas de trata sexual, laboral y de niños, para llevárselos. La trata es una de las formas más terribles de la esclavitud. Es volver a aquello que uno piensa que no sucede más y que, sin embargo, sigue sucediendo. Hay criminales capaces de secuestrar chicas, de inventarles una historia a mujeres sobre una vida mejor o simplemente las suben a un auto a punta de pistola y se la llevan. Este trabajo tan sensible en zona de frontera es clave para poder bajar este delito tan aberrante», apuntó Bullrich. «Tenemos que lograr que esta zona sea realmente limpia, con ganas de mejorar la vida de cada uno de los ciudadanos de Aguas Blancas, de Orán, de los que vienen aquí; de las fuerzas de seguridad y de los que trabajan en este puesto», concluyó.

Por su parte, apuntó a asegurar toda la frontera y destacó la intervención del Gobierno nacional en la provincia de Salta. «Vino a Salta (Bullrich), pisó nuestro suelo y vio nuestra realidad. Cuando un Gobierno escucha y actúa, la diferencia se nota». «Debe ser la primera vez en la historia en que una ministra de Seguridad haya venido tantas veces a esta frontera caliente que tanto lo salteños pedíamos que los gobiernos nacionales nos escuchen y nos acompañen», señaló el mandatario.