Tras las repercusiones generadas por el fracaso del debate sobre el proyecto de Ficha Limpia en la Cámara de Diputados, el Gobierno confirmó este viernes que Javier Milei realizará modificaciones en la iniciativa original del PRO y volverá a impulsar la ley en el Congreso. Esta decisión fue anunciada por el vocero Manuel Adorni durante su habitual conferencia de prensa, donde detalló los pasos a seguir para mejorar y reactivar la propuesta legislativa.

Adorni informó que el presidente ha dialogado con Silvia Lospennato, la legisladora y autora de la propuesta, comprometiéndose a trabajar personalmente en algunos puntos clave para perfeccionar el proyecto. Para llevar a cabo estas modificaciones, Milei contará con el asesoramiento del abogado Alejandro Fargosi, quien ayudará a identificar y corregir los “agujeros” de la iniciativa, asegurando que la normativa no excluya a personas honradas y capacitadas para ocupar cargos públicos.

“El gobierno no quiere que corruptos vuelvan a ocupar cargos en el Estado, porque quien claramente fue condenado por un acto de corrupción no tiene ninguna razón de ser, en un país normal, para que vuelva a manejar fondos públicos y vuelva a manejar los fondos de los destinos de la patria. Así que estamos a favor de Ficha Limpia”, afirmó Adorni, desmintiendo cualquier acusación de un supuesto “pacto de impunidad” con el kirchnerismo.

Fracaso del debate por falta de quórum

El proyecto de Ficha Limpia no logró debatirse nuevamente en la sesión convocada para este jueves debido a la falta de quórum. Se requerían 129 diputados para tratar la iniciativa, pero solo asistieron 116 legisladores, una cifra inferior a la de la semana pasada. La ausencia de diputados de todos los bloques, incluyendo los ocho de La Libertad Avanza (LLA), tres de PRO, dos de UCR, siete de Encuentro Federal y dos de Democracia Para Siempre (DPS), fue determinante para que el proyecto perdiera su estado parlamentario. Además, ninguno de los 99 legisladores que forman parte de Unión por la Patria (UP) asistió a la sesión, aunque sí estuvieron presentes seis miembros de la Coalición Cívica (CC) y tres del Movimiento de Integración y Desarrollo (MID).

Objetivos y mejoras del proyecto

Adorni subrayó que el principal objetivo de las modificaciones es cerrar las lagunas que podrían permitir que individuos con antecedentes de corrupción accedan a cargos públicos. “El proyecto tiene que tener los reparos suficientes como para que en esos lugares los malos no venzan a los buenos, inventando denuncias y haciendo que estos no puedan participar. Lo cierto es que nosotros, me refiero a nuestro espacio o al espacio que yo pertenezco, al que pertenece el Presidente y a los que lo conformamos, los que gobernamos, somos el único espacio con el currículum que está limpio. Entonces somos los más interesados en que, efectivamente y por defensa de los argentinos, el proyecto salga”, afirmó.

Reimpulso del proyecto en el próximo año

El vocero presidencial anunció que, a pesar de la caída de la sesión, el Gobierno no abandonará el impulso para sancionar la ley de Ficha Limpia. “Efectivamente, la diputada Lospennato le escribió al presidente Milei, refiriéndose a lo triste que se sentía con el rechazo con el que el proyecto no haya avanzado y el presidente se comprometió con ella a impulsar un nuevo proyecto de ficha limpia con estos tipos de agujeros o pequeñas cuestiones que hay que corregir para que no pase lo que he descrito”.

Asimismo, Adorni reiteró que Fargosi será el encargado de asesorar a Milei en la elaboración del nuevo proyecto, asegurando que los buenos participantes puedan acceder a cargos públicos sin que individuos corruptos interfieran en el sistema. “Quien va a estar a cargo de asesorar al presidente para terminar de pulir el nuevo proyecto será el doctor Alejandro Fargosi, quien efectivamente va a ser el que asesore al Presidente para que los buenos participen y los malos queden afuera”, afirmó.

Reintroducción del proyecto en el Congreso

Con la caída de la sesión, el proyecto de Ficha Limpia perderá su estado parlamentario. Esto implica que, a partir del 1 de marzo, cuando comiencen las sesiones ordinarias, legisladores o el Ejecutivo deberán enviarlo nuevamente a las comisiones correspondientes para su tratamiento. Este retraso no detiene los esfuerzos del Gobierno por implementar una normativa que promueva la transparencia y la ética en la política argentina.