La mamá de Milagros no encuentra consuelo
A menos de una semana de haber sido condenado a prisión perpetua por la desaparición y asesinato de Milagros Avellaneda (26) y Benicio (2), Roberto Rejas se fugó de la sede de la División Bomberos de San Miguel de Tucumán.
Cinco años pasaron desde la desaparición de Milagros y su hijo; ahora su mamá, Amalia Juarez, no encuentra la justicia que tanto buscó. En reclamo y pidiendo por la captura de Rejas, hoy se movilizó acompañada de organizaciones sociales hacia las puertas de Tribunales Penales, en dónde exigió la renuncia del ministro de Seguridad Claudio Maley y la detención del padre de Roberto Rejas, sus hermanas y su novia, a quienes acusan de ser cómplices de la fuga.
«La perpetua de Rejas no me trajo ninguna felicidad», señaló Juárez, mientras denunció que «se escapó con la complicidad de la guardia».
Amalia contó además que fue una amiga, María Luna, quién le avisó de la fuga de Rejas: «Me llamó María y me dijo: ‘¿Amalia estás sentada? Rejas se escapó de Bomberos'». A partir de esa llamada, volvió el calvario para la madre de Milagros, quién inmediatamente recibió el apoyo de vecinos que se acercaron a su casa para una larga vigilia.
La abogada de la familia, Silvia Furque, se refirió a la fuga y señaló que «era previsible», ya que por el peso de la condena, Rejas debió hacer pasado directamente al penal y no a una comisaría.
En cuanto a la búsqueda, la abogada señaló que se perdió tiempo y duda de la versión que indica que el asesino se escapó a las 21:45 h. «Esto tuvo que haber sucedido antes, cerca de las 20 h», declaró.
El operativo montado por la policía continúa a la espera de conocer el paradero del Rejas. Fronteras provinciales y nacionales en alerta y con una recompensa de $2 millones para quien aporte información certera sobre el caso.