El presidente de la Cámara de Supermercadistas de Tucumán, Guillermo Saccomani, compartió su análisis sobre la situación actual del sector, poniendo énfasis en el comportamiento de las ventas, los precios y las expectativas para el cierre del año. «Ha sido un año bastante difícil y complicado», reconoció. el empresario. Además, señaló que los incrementos en los servicios de energía eléctrica y gas afectaron considerablemente la actividad comercial. «El aumento de los servicios ha sido considerable con respecto al porcentaje de aumento en los productos; en algunos casos, creo que ha superado el 200%», detalló.

Este panorama llevó al cierre de muchos negocios pequeños y medianos en la provincia. «Hoy te diría que muchos negocios han desaparecido, debido a los altos costos de los alquileres y de los servicios», lamentó el referente de los supermercadistas.

A pesar de los desafíos, Saccomani destacó un aspecto positivo: «La inflación va disminuyendo». Sin embargo, las ventas se mantienen prácticamente estancadas. «Más allá de algunos picos importantes en fechas puntuales como el Día de la Madre, las ventas siguen estancadas», comentó.

El empresario percibe una mayor confianza por parte de los consumidores. «Creo que el consumidor está confiado en que esto va a cambiar, y eso sería importante para que la actividad recupere su funcionamiento», expresó. Añadió que actualmente se está trabajando con mayor tranquilidad, ya que muchos productos mantienen su precio e incluso algunos han bajado.

Expectativas positivas para diciembre

Con la mirada puesta en el último mes del año, Saccomani se mostró optimista: «Tenemos unas expectativas muy buenas, creo que diciembre puede ser un gran mes». Aunque reconoció que un solo mes no compensará la situación vivida durante todo el año, mantiene la fe y la esperanza de que las cosas puedan cambiar.

«Esperamos que todo esto pueda cambiar y que la actividad vuelva a tener nuevamente las ventas que en un momento dado se daban a nivel país», manifestó. Las festividades de Navidad y fin de año suelen impulsar el consumo, y el sector supermercadista confía en que este año no será la excepción.

Saccomani hizo hincapié en la dificultad de mantener los costos de estructura en las condiciones actuales. «Los costos de estructura son muy difíciles de mantener para seguir de la forma en que veníamos», indicó. A pesar de ello, resaltó que hay una cierta estabilidad que permite trabajar con mayor esperanza y certidumbre.