Tras llamarlo «malparido» el jueves pasado, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, volvió a insultar ayer al presidente argentino, Javier Milei. Durante un acto de campaña en el estado insular de Nueva Esparta, al noreste de Venezuela, el heredero del régimen chavista agravió severamente al libertario al que calificó de «nazi fascista». A 6 días de las elecciones presidenciales en Venezuela, el candidato opositor Edmundo González Urrutia le saca amplias ventajas en las encuestas. El panorama social y los distintos frentes internacionales, entre ellos el del jefe de Estado argentino, pone incómodo a Maduro. Ante una derrota que parece inminente, el presidente venezolano comenzó a radicalizar el ambiente. Además, teorizó con «una guerra civil» y «un baño de sangre» en caso de ser vencido en las elecciones del próximo 28 de julio.

En el acto de ayer, Maduro volvió a cargar contra Milei y sus políticas libertarias. “él (Milei) se puso bravo. Yo dije la verdad, ese Milei es un malparido nazi fascista. Es un malparido que le está pasando la motosierra a los trabajadores, a las trabajadoras» afirmó Maduro. Maduro aprovechó el momento para hacer un paralelismo con la política de ambos países y preguntó a sus seguidores si «quieren que pase en Venezuela lo que está pasando en Argentina”, calificando de «desastre social» los resultados de la gestión libertaria.

Maduro comenzó a utilizar todo tipo de comparaciones relacionadas con la Argentina de Milei durante sus actos de campaña. Además, lo vinculó con un supuesto boicot internacional a su candidatura. No obstante, el Gobierno argentino afirmó el viernes que las declaraciones de Maduro no ameritan respuesta porque provienen de un “dictador” y un “imbécil”. El vocero presidencial Manuel Adorni, sostuvo días atrás que «Maduro es un personaje que se ha transformado (o siempre lo ha sido) en un dictador. Y las palabras de un dictador no ameritan un análisis porque vienen de una persona que tiene trastocados los valores éticos y morales y, por supuesto, está en contra de lo que nosotros defendemos y pregonamos, que es la democracia».

Elecciones en Venezuela

La encuestadora ClearPath y la consultora Poder y Estrategia difundieron sondeos realizados en julio. Estos muestran una amplia ventaja del opositor sobre Maduro. Según ClearPath, González Urrutia cuenta con el 59% de las intenciones de voto frente al 31% de Maduro, por lo que la brecha alcanza los 28 puntos entre los votantes que confirmaron su participación en la jornada electoral. En tanto Poder y Estrategia expuso que el primero se haría con el 64% de las papeletas mientras que el chavista sólo obtendría 21% de las mismas, lo que expone una distancia aún mayor de 43 puntos. De este modo, se habla de una candidatura sólida, con altas probabilidades de ascender al gobierno.

Amenazas, acusaciones y ataques a la oposición

Fuentes periodísticas anticipan serios conflictos en Venezuela el próximo fin de semana. Existen fuertes sospechas sobre posibles fraudes del oficialismo en todo el país. Dada la cuestionada calidad institucional y democrática de Venezuela, los analistas argumentan que el candidato opositor debería sacar un amplio margen de ventaja para que una victoria no sea objetable. Sumado a esto, las declaraciones de Maduro frente al supuesto «fraude» de la oposición que lleve a una derrota electoral generan un fuerte clima de tensión.

«Si la derecha engañara a la población en Venezuela podría haber un baño de sangre y una guerra civil porque este pueblo no se dejará quitar la patria ni los derechos sociales», clamó Maduro en un amenazante discurso hace pocos días. Además, acusó a la oposición de planear «un apagón eléctrico para cambiar el voto del pueblo». Por otro lado, agentes revolucionarios atacaron ayer los vehículos de la caravana de la líder opositora María Corina Machado. «La campaña de Maduro es la violencia y es responsable de cualquier daño a nuestra integridad física. No nos detendrán», manifestó en respuesta la referente liberal.