“Comedores fantasmas”: el Gobierno presentó más pruebas en la justicia
El Ministerio de Capital Humano ratificó ante la justicia que “casi la mitad” de los comedores del país que recibían fondos del Estado “no existen”. La cartera que dirige Sandra Pettovello presentó más pruebas y describió un mecanismo para quedarse con fondos y mercadería dirigida a sectores vulnerables. La maniobra involucraría a exfuncionarios y organizaciones sociales. Según consta en la denuncia penal, se verificó que casi el 50% de los comedores a cargo de los movimientos sociales y piqueteros, a los que asistían las gestiones anteriores con “alimentos frescos”, eran inexistentes, dejaron de funcionar, sus referentes se mudaron de barrio, o sus direcciones no existían. La causa recayó en el juzgado de Ariel Lijo e interviene el fiscal federal Ramiro González.
Las organizaciones sociales vinculadas a los 1.201 “comedores no validados”, están vinculados a organizaciones como el Movimiento Evita liderado por Emilio Pérsico; la CTEP y el MTE referenciados con Juan Grabois; la Corriente Clasista y Combativa (CCC) coordinada por el exdiputado kirchnerista Juan Carlos Alderete; Barrios de Pie, coordinado por el exfuncionario de la Cartera de Desarrollo Social, Daniel Menéndez y Eduardo Belliboni, líder del Polo Obrero. “Todo esto parece ser un plan sistemático para cometer varios hechos de corrupción contra el pueblo argentino, violentando derechos humanos como la alimentación, la libertad, la dignidad y el trabajo de los sectores más vulnerables”, concluyeron desde la cartera de Pettovello. Las pruebas fueron presentadas el día de ayer. Apunta contra los principales dirigentes sociales y exfuncionarios del Gobierno anterior. La investigación se desprendió de una auditoría interna ordenada por la ministra de Capital Humano.
Según la denuncia, los dirigentes sociales habrían recibido partidas de comida a pesar de que los comedores no funcionaban. Según las auditorías, solo rendían el 8% de las partidas de alimentos que mandaba Desarrollo Social. “Sólo se pudieron relevar el 52,3% de los comedores. El restante 47.7% no funciona más como tal; el 25% de las direcciones no existen o nunca funcionó un merendero”, precisaron. Leila Gianni, subsecretaria legal de Capital Humano, presentó nueva documentación que daría cuenta de la irregularidad en miles de toneladas de alimentos. Una semana atrás, Pettovello presentó ante el fiscal Ramiro González planillas con 1.201 comedores “no validados”, sus direcciones y las organizaciones que los inscribieron en el Registro Nacional de Comedores y Merenderos (RENACOM). Este se encontraba bajo la órbita de la dirigente de La Cámpora, Laura Alonso, entonces secretaria de Inclusión Social.
Desde el Gobierno aseguran que los bolsones se utilizaban como herramienta de extorsión o se vendían. Esto quedó plasmado también en la causa que investiga el fiscal Gerardo Pollicita. La misma tiene como imputados a 28 dirigentes del Polo Obrero, el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL) y Barrios de Pie. La justicia impuso el “secreto de sumario” y aceptó como querellante al Ministerio de Capital Humano.