El color de la orina es un indicador clave que puede proporcionar información relevante sobre la salud general de una persona, según expertos de la Mayo Clinic, en Estados Unidos. El color normal de la orina varía de amarillo claro a amarillo pálido, el denominado «amarillo ámbar». Sin embargo, varios factores, como la ingesta de ciertos alimentos y medicamentos, pueden alterar su color.

Mayo Clinic explica que el color amarillo de la orina está relacionado con la cantidad de agua que se consume. Cuanta más agua se beba, más clara será la orina, ya que los líquidos diluyen los pigmentos amarillos. Por otro lado, una menor ingesta de agua puede intensificar el color amarillo de la orina.

Recientemente, investigadores de la Universidad de Maryland y los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos identificaron la enzima responsable de darle el tono amarillo a la orina: la bilirrubina reductasa. Este descubrimiento abre nuevas puertas para investigar el papel del microbioma intestinal en condiciones como la ictericia y la enfermedad inflamatoria intestinal.

Cuando los glóbulos rojos se degradan, generan bilirrubina, un pigmento naranja brillante. La bilirrubina normalmente se secreta en el intestino y se excreta, pero su exceso puede causar ictericia. La bilirrubina reductasa, una enzima presente en los microbios intestinales. La cual convierte la bilirrubina en urobilinógeno, que finalmente se degrada en urobilina, responsable del color amarillo de la orina.

La orina normal puede variar desde casi incolora hasta amarilla oscura. La cantidad adecuada de líquidos para mantener una orina saludable depende de diversos factores, y se recomienda beber suficiente líquido para sentir la necesidad de orinar cada 2 a 3 horas. Sin embargo, se aconseja consultar con un profesional de la salud sobre la cantidad adecuada según el tamaño, nivel de actividad y condiciones específicas de cada persona.

El color inusual de la orina puede ser un indicio de problemas de salud, como infecciones urinarias, cálculos renales, o incluso ciertos tipos de cáncer. En casos de sangre en la orina, orina oscura o de color naranja, se recomienda buscar la orientación de un profesional de la salud. Ya que podría indicar problemas en el funcionamiento del hígado u otras condiciones más serias.

Además, algunos medicamentos o colorantes en los alimentos pueden causar que la orina adquiera tonos inesperados, como azul o verde. En tales casos, se sugiere comprender la relación con la ingesta de estos elementos y no alarmarse sin razón.