En el mediodía de ayer, el pleno del oficialismo escuchó con atención el alegato de Cristina Kirchner, en la tercera jornada de su defensa. El presidente, Alberto Fernández, siguió el discurso completo, en su despacho de Casa Rosada, sin agenda oficial para ese día. Al terminar la transmisión, expresó su satisfacción con la declaración.

El primer mandatario deslizó su conformidad, en especial por un pasaje que coincidió con su propia presentación como testigo en la misma causa. Sin embargo, en su entorno deslizaron quejas sobre la excesiva centralidad, que le está dando la Vicepresidenta a la agenda judicial, un tema alejado de las preocupaciones de los ciudadanos. “Todo lo que dijo Cristina le pareció muy atinado”, dijeron funcionarios de su entorno.

Según fuentes de Casa Rosada, la cúpula presidencial considero que el mensaje fue “mucho más técnico que político”. En contraste con el del 24 de agosto, durante la presentación anterior del abogado defensor Carlos Beraldi. En dicha ocasión, el letrado pidió a los fiscales del caso, Sergio Mola y Diego Luciani, que “agarren la Constitución, los libros de derecho administrativo y el código penal y procesal”. Y luego dijo “no muerden”, ironizando.

Alberto Fernández, el presidente con la peor imagen pública

Muy cerca de alcanzar los tres años de su gestión, el presidente registra una imagen positiva de apenas 7,9%. Como contrapartida, la consideración negativa sobre su figura aumentó significativamente, hasta alcanzar el 74,5%. La imagen regular, por su parte, no alcanza a equilibrar la situación, dado que es de 14,9%. La encuesta fue realizada por la consultora Giacobbe y Asociados, que fueron difundidos el viernes en el programa Casi patriotas.

El director del estudio, Jorge Giacobbe, recordó que el jefe de Estado llegó a tener 68% de imagen positiva, durante la primera parte de la pandemia. “20 puntos porcentuales más del universo que lo votó. Alberto se dilapidó 60 puntos de imagen positiva en lo que va de su Gobierno. Es un récord absoluto”. destacó Giacobbe al explicar los resultados de la encuesta. Y los contrapuso con la perspectiva histórica. “Ni (Fernando) de la Rúa llegó a subir tanto y después caer”, concluyó.