Un equipo de científicos ha logrado captar cómo evoluciona el cerebro de una mujer durante el embarazo. El estudio transcurrió durante tres años, revelando una imagen detallada de los cambios cerebrales que se producen. Los resultados sugieren que el “cerebro de mamá” es una realidad, aunque no en el sentido negativo de confusión cognitiva que a menudo se asocia con las madres primerizas.

La neurocientífica Liz Chrastil se sometió a 26 escaneos cerebrales durante su embarazo. Capturando cómo su corteza cerebral se encogía y adelgazaba a medida que avanzaba el embarazo. Estos cambios, que persistieron hasta dos años después del nacimiento, no indican pérdida de capacidad. Al contrario, indican una optimización del cerebro para el desafío de la maternidad. El estudio, publicado en Nature Neuroscience, revela que las conexiones entre las regiones del cerebro mejoran durante el embarazo.

Cambios cerebrales durante el embarazo

El embarazo desencadena una serie de modificaciones hormonales que remodelan el cerebro. Según Susana Carmona, los cambios en la materia gris pueden vincularse a un mayor apego maternal, mientras que la neurocientífica Emily Jacobs comparó este proceso con esculpir una obra maestra como “David” de Miguel Ángel.

El estudio resalta que el cerebro de la mujer se adapta de manera fluida, lo que los neurocientíficos llaman «plasticidad», permitiendo que el cerebro se prepare de manera más eficiente para la maternidad. Investigaciones adicionales buscan determinar cuán universales son estos cambios y cómo afectan el comportamiento o los riesgos como la depresión posparto en la salud.