
El hábito nocivo que la mayoría de la gente repite al despertar y afecta a la salud cerebral

Si lo primero que haces al abrir los ojos es desbloquear el teléfono para revisar la hora, mirar el pronóstico del tiempo o leer notificaciones, podrías estar perjudicando tu salud cerebral. Este hábito, conocido como doomscrolling, no solo afecta la concentración, sino que también puede aumentar los niveles de ansiedad y fatiga mental.
El término proviene de la combinación de doom (condena) y scrolling (desplazarse) y hace referencia al hábito de consumir contenido digital de forma compulsiva, especialmente en redes sociales. Según la neurocientífica estadounidense Emily McDonald, esta práctica genera un flujo constante de dopamina debido a la imprevisibilidad de la información que encontramos, similar al mecanismo de recompensa de una máquina tragamonedas.
“Cada vez que navegamos o actualizamos nuestras noticias, vemos contenido nuevo, desafiante e impredecible. La incertidumbre del resultado gratificante nos proporciona una liberación constante de dopamina”, explicó McDonald al medio francés TFI. Sin embargo, esta dopamina artificial no produce satisfacción duradera y genera la necesidad de seguir consumiendo contenido, creando un ciclo difícil de romper.
El impacto es mayor cuando este hábito se repite en la mañana, ya que el cerebro recién despierto se encuentra en un estado más receptivo y vulnerable. Esto hace que las emociones negativas, la sobrecarga de información y el estrés impacten de manera más profunda en el estado de ánimo.
Cómo el doomscrolling afecta la concentración
Un estudio realizado por Samsung reveló que este comportamiento afecta directamente la capacidad de concentración. En los últimos 20 años, la predisposición del cerebro para mantenerse atento se redujo de 12 a 8 segundos, lo que dificulta la capacidad de retener información y procesarla de manera efectiva.
La constante exposición a noticias, muchas de ellas negativas, mantiene al cerebro en estado de alerta y afecta el equilibrio emocional. Fatmata Kamara, enfermera especialista en salud mental, explicó a Cosmopolitan UK que “cuando las noticias provocan emociones fuertes o son especialmente negativas, resulta tentador mantenerse actualizado, pero esto nos sumerge en un estado de ansiedad constante”.
Además, el doomscrolling está relacionado con el aumento de la hormona del estrés, el cortisol. “Tu cuerpo se inunda de cortisol, preparándose para luchar contra una amenaza percibida, lo que te hace más propenso a cambios de humor y a la fatiga emocional”, agregó Kamara.
Recomendaciones para evitar el doomscrolling
Los expertos coinciden en que la mejor manera de evitar este impacto negativo es cambiar la rutina matutina. Algunas estrategias incluyen:
- Evitar revisar el teléfono durante los primeros minutos después de despertar.
- Desactivar notificaciones innecesarias para reducir la tentación de abrir redes sociales.
- Reemplazar el hábito con actividades como estiramientos, meditación o lectura de un libro físico.
- Usar despertadores tradicionales en lugar del teléfono para evitar la inmediatez de las pantallas.
El doomscrolling puede parecer inofensivo, pero su impacto en la salud mental y la concentración es significativo. Tomar conciencia sobre cómo comenzamos el día y reducir el uso del teléfono en los primeros momentos de la mañana puede contribuir a una rutina más saludable y equilibrada.