Con el foco puesto en la salida del cepo cambiario, el Banco Central (BCRA) eliminó algunas restricciones para comprar dólar MEP y contado con liquidación (CCL). Durante los últimos cuatro años, la administración de Alberto Fernández había impuesto diversas limitaciones para controlar la demanda y evitar un recalentamiento de precios en estas cotizaciones.

Nuevas medidas y flexibilizaciones

Desde ahora, personas que recibieron ayudas estatales durante la pandemia, como créditos a tasa cero o refinanciamiento de tarjetas de crédito, podrán acceder a estos tipos de cambio financiero. Además, se eliminó la prohibición para aquellos que reciben subsidios en servicios de electricidad, gas o agua.

“Habilitados para suscribir créditos hipotecarios en pesos y acceder al dólar MEP. Para concretar sus operaciones inmobiliarias todas aquellas personas que estaban incluidas en esa categoría”, explicó el Banco Central. Esta flexibilización también aplica para la transferencia de títulos valores a entidades depositarias del exterior. Y canje de títulos emitidos por residentes por activos externos y adquisición de cedears o bonos corporativos en dólares, según el Grupo SBS.

El BCRA afirmó: “Se dio un nuevo paso en el proceso de remover y flexibilizar las regulaciones de acceso al mercado de cambios. Y que tiene como objetivo final la eliminación total de las restricciones”.

Restricciones aún vigentes

El dólar MEP se popularizó en tiempos de cepo cambiario. Mediante la compra de un bono en pesos y su posterior venta en dólares, los argentinos pueden sortear las restricciones del dólar ahorro sin el límite mensual de US$200. El CCL permite girar divisas a una cuenta bancaria fuera del país con la misma operación.

A pesar de las flexibilizaciones, aún existen condiciones para comprar dólar MEP y CCL. Actualmente, quienes hayan comprado dólar solidario (oficial) en los últimos 90 días no pueden acceder a estos tipos de cambio financiero. Además, quienes adquieran dólar Bolsa se comprometen a no comprar dólar ahorro en los 90 días posteriores. Esta traba afecta principalmente a las compañías importadoras.

El «parking» también sigue vigente, obligando a los ahorristas a mantener el bono en pesos en cartera durante un mínimo de 24 horas antes de venderlo contra dólares. Anteriormente, este plazo era de un día hábil para bonos Bonares (AL) y de cinco días hábiles para bonos Globales (GD).