La Unión Argentina de Salud (UAS) ha emitido un comunicado advirtiendo que más de 5.000 centros privados de salud en todo el país, se encuentran al borde de la quiebra debido a la falta de márgenes para enfrentar ni siquiera el corto plazo. En este contexto, han solicitado apoyo del Gobierno nacional para evitar una crisis mayor.

El Dr. Marcelo Kaufman, integrante de la UAS, brindó declaraciones al respecto. “El comunicado que hemos elevado la semana pasada tiene que ver directamente con lo que se llama emergencia sanitaria. Vigente desde la crisis de 2001 en Argentina y que ningún gobierno ha podido solucionar hasta ahora”, explicó. Esta emergencia sanitaria, que venció el 31 de diciembre de 2023 y no fue prorrogada, protegía de embargos sobre los activos.

Kaufman advirtió que, a menos que la situación se corrija, se producirán embargos y quiebras en numerosas clínicas y sanatorios del país. «La AFIP anunció que no provocaría embargos hasta el 31 de julio de este año. Pero después de esa fecha, si no se toma una medida, veremos embargos y quiebras por todos lados».

Los planteos del sistema privado de salud

El Dr. Kaufman subrayó la necesidad de prorrogar la emergencia sanitaria o evitar que la AFIP embargue los activos de las clínicas y sanatorios. «El Estado debe intervenir principalmente en el costo de los medicamentos, que consume una gran parte de los recursos. Impidiendo que podamos aumentar los honorarios médicos y los salarios de los trabajadores de la salud«.

También mencionó que el sector paga IVA por todos los productos, sin poder descargarlo, lo que lo convierte en un costo adicional. «Es imprescindible estabilizar la macroeconomía. Con la inflación que hemos tenido y cobrando las prácticas a 90 o 120 días después de efectuadas, habiendo pagado tres o cuatro meses de salarios y aranceles médicos, es imposible sostener el sector», analizó.

Kaufman destacó que, aunque han presentado diversas medidas y propuestas independientemente del gobierno de turno, es esencial que la población entienda que esta crisis no se limita a la medicina prepaga. «Este problema afecta a todo el sector privado de salud, que atiende al 70% de la población. El otro 30% se atiende en el hospital público. No importa si es la obra social provincial, PAMI o la mejor de las prepagas, el 70% se atiende en el sector privado, que hoy no es sustentable», concluyó.