Amenaza narcoterrorista a Bullrich: detuvieron a siete sospechosos
Efectivos de Gendarmería Nacional detuvieron a siete sospechosos por la amenaza narcoterrorista dirigida a la ministra de Seguridad Patricia Bullrich y al gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro. El operativo se realizó en las últimas horas por orden de la jueza María Servini. Hay tres sujetos en calidad de detenidos y cuatro demorados. Todos serán trasladados a Buenos Aires, para ser indagados en las próximas horas en los tribunales federales de Comodoro Py. La causa se inició el 1 de diciembre cuando un grupo de presuntos narcoterroristas subieron un video a redes sociales amenazando a funcionarios y fiscales con un nuevo derrame de sangre.
Los presuntos implicados en la amenaza narco fueron capturados en la zona de Puerto San Martín, en el departamento San Lorenzo, a cuarenta kilómetros en automóvil de Rosario. Al momento de la detención se les encontró una serie de revólveres no compatibles con los del video de amenaza. No obstante, se hallaron mamelucos que tendrían coincidencias con los utilizados en la grabación.
Análisis de la escena
La Policía Federal determinó que los protagonistas del video poseían una ametralladora FMK3, un FAL modelo Para, una pistola (probablemente una Glock) con kit RONI fabricado por la firma argentina Bersa, una escopeta a chimaza tipo Ithaka o Batán y una pistola que también podría ser de la marca Bersa. Por otro lado, los investigadores analizaron y procesaron la voz del sujeto parece leer la amenaza en la fonotecasistema biométrico de voz. En este punto, las características aurales apuntan a una persona joven por lo que probablemente no haya muestras almacenadas.
La vestimenta, el ambiente, entre otros indicios que aparecen en la escena, fueron analizadas por personal de las Divisiones Fotografía Policial y Scopometría de la PFA. Fuentes del caso sostienen que los mamelucos blancos que cubren la totalidad del cuerpo de los sujetos evitó identificar rostros y visibilizar vestimenta, tatuajes o marcas corporales. Lo mismo ocurre con los guantes quirúrgicos.