La jueza Loretta Preska, a cargo del tribunal del Distrito sur de Manhattan, en EEUU, volvió a fallar en contra de la Argentina. Ahora el país se encamina a tener que negociar con el fondo inglés Burford cuál es la compensación por la expropiación de YPF en 2012. El acto fue considerado como «mala praxis expropiatoria por parte del Estado», cuando Cristina Kirchner era presidenta.

Cabe aclarar, que Preska no fijó una cifra, pero optó por el peor escenario para el país. Y que ya había sido encontrado culpable de expropiar mal la petrolera. Sin embargo, la magistrada decidió que el esquema de compensación económica que propuso la querella era el adecuado. Burford dijo que el resarcimiento debe rondar los u$s 16.000 millones. El Estado argentino, en tanto, indicó que esa cifra es de u$s 5.000 millones. El estudio inglés cotiza en la bolsa de Londres y se especializa en comprar juicios, negociar y litigar durante años por los beneficios económicos.

Ahora, las partes deberán negociar sobre la base del tope del reclamo. La Procuración del Tesoro declaró que apelarán el fallo. Gabriela Cerruti, la portavoz del gobierno, dijo en Twitter que el Estado “apelará inmediatamente el fallo de la jueza Loretta Preska. El presidente Fernández analizó la cuestión con la Procuración del Tesoro. Seguiremos defendiendo la soberanía energética y nuestra empresa estatal YPF frente a los fondos buitres”. La curiosa afirmación de Cerruti se consideraría un error, ya que el fallo llega no por un vencimiento de deuda, sino por una acción errónea de parte del Estado.

Esto no se resuelve ya. Puede pasar que el juicio y la eventual negociación se suspenda a la espera de que llegue el próximo gobierno y defina su estrategia. Es lo que pasó con (Mauricio) Macri y los holdouts, por ejemplo”, aseguró Sebastián Maril, CEO de Latin Advisor. «Es algo que se termina arreglando entre partes, con el visto bueno final de la jueza. Estaba seguro que no iba a poner el monto, pero esta decisión fija el escenario de negociación.»