El día de hoy, el presidente Alberto Fernández encabezó un acto en la localidad de Cañuelas y apuntó con virulencia contra el gobierno anterior. El evento tuvo un marcado tono de campaña y buscó mostrar unidad interna. A más de un año de las elecciones, en la inauguración en la que se anunció el inicio de obras en la Ruta Nacional 3, hubo un marcado tono electoral. «Ladrones de guante blanco», calificó el primer mandatario a parte de la oposición.

La línea discursiva de los funcionarios del Frente de Todos fue clara. Todos señalaron con énfasis, una y otra vez, que las políticas del gobierno anterior fueron perjudiciales. Incluso se emitió un spot que incluyó unas palabras del expresidente, Mauricio Macri, con el objetivo de exponer promesas que no se cumplieron.

En ese marco, el jefe de Estado y sus compañeros buscaron bajarle el tono a la feroz interna que divide al oficialismo y señalaron que la pelea, en realidad, no es entre integrantes de un mismo espacio político, sino entre dos modelos totalmente opuestos.

“Vinieron a hacer obras maravillosas que nunca hicieron”, denunció el Presidente en el inicio de su discurso. “Cuando el Estado se hizo cargo de las obras de PPP (los contratos de Participación Público Privada), los precios bajaron un 70%. Estoy esperando que alguna vez un juez llame a esos ladrones de guante blanco y les pida explicaciones por la deuda que tomaron», sentenció.