En el estadio Lusail, donde hace dos años atrás la Selección Argentina de fútbol celebró ser la campeona del mundo, esta tarde, el poderoso Real Madrid derrotó 3-0 al Pachuca de México y se consagró campeón de la Copa Intercontinental de la FIFA 2024, que se desarrolló con un nuevo formato de competencia. Los tantos del conjunto «Merengue», que volvió a ganar este trofeo luego de dos décadas, fueron marcados por Kylian Mbappé, tras una buena jugada colectiva, Rodrygo, mediante un hermoso disparo, y  Vinicius Junior, de penal.

El vigente campeón de la Champions League sacó adelante un partido que, en un principio, pareció, se le podía complicar, o al menos enredar. Pero con el correr de los minutos y gracias a la preponderancia de sus individuales, Real Madrid ganó con solvencia ante un Pachuca, algo desgastado por haber jugado dos partidos previos para alcanzar la final, el miércoles pasado ante Botafogo de Brasil (ganó 3-0) y el sábado que pasó frente al Al-Ahly de Egipto (ganó 6-5 por penales tras un 0-0 en 120 minutos).

Volviendo a la final Intercontinental que se desarrolló hoy, tras una primera parte discreta, al Real Madrid le alcanzó con una vistosa acción de conjunto y su primer disparo al arco para pasar al frente. Recién a los 37 minutos, un gol del francés Kylian Mbappé, que volvió en buen nivel tras una lesión muscular, dio tranquilidad al conjunto dirigido por Carlo Ancelotti. El francés aprovechó un desborde de Vinícius Jr. y la empujó ante un arco vacío.

En la segunda etapa, con el 1-0 parcial y el cansancio acumulado en Pachuca, ya no hubo equivalencias. Real Madrid confirmó la victoria desde los 8 minutos con un bonito tanto del brasileño Rodrygo que gambeteó hacia su izquierda, frenó en la medialuna y la colgó del ángulo opuesto. Luego, sobre el final del partido, un penal contra Lucas Vázquez, que marcó el VAR con cierto retraso, permitió que «Vini» estableciera la diferencia definitiva a los 84′ de juego.

Cabe señalar que por el nuevo formato implementado por la FIFA, el campeón de Europa solo disputa la gran final de la Copa Intercontinental; mientras que los campeones de los restantes continentes se van eliminando entre sí en fases previas. Con toda esa ventaja, más las enorme jerarquía de su plantel, el «Merengue» dejó en claro su superioridad y obtuvo su cuarta Copa Intercontinental tras las conseguidas en 1960, 1998 y 2002. Vale recordar que el torneo se disputó hasta 2004, cuando llegó para quedarse el «Mundial de Clubes». Ahora, la idea de la FIFA es que se vuelva a disputar anualmente.