De qué se trata el «síndrome del corazón festivo»: por qué es peligroso y cómo evitarlo
Con la llegada de diciembre, las festividades multiplican reuniones, cenas y celebraciones que, aunque significan momentos de alegría, también pueden traer riesgos para la salud. Entre ellos, el “síndrome del corazón festivo”, un cuadro médico que afecta el ritmo cardíaco y que, según especialistas, surge principalmente por el consumo excesivo de alcohol en cortos períodos.
El término fue acuñado en 1978 por el médico Philip Ettinger para describir la aparición de arritmias cardíacas, como la fibrilación auricular, en personas aparentemente sanas tras consumir alcohol en exceso. Este fenómeno suele ocurrir durante celebraciones como Navidad, Año Nuevo u otras reuniones sociales.
El doctor Javier César Barcos, cardiólogo del Hospital Británico, explica que la fibrilación auricular es la arritmia más común en adultos y puede generar latidos irregulares y caóticos en el corazón. Aunque generalmente desaparece una vez que cesa el consumo de alcohol, puede reaparecer si se repite el exceso.
Además de la fibrilación auricular, el síndrome puede manifestarse con otros trastornos del ritmo cardíaco, como taquiarritmias (latidos acelerados), bradiarritmias (latidos anormalmente lentos) o extrasístoles (latidos adicionales), indica el especialista.
Por qué es peligroso
El doctor Mario Boskis, miembro de la Sociedad Argentina de Cardiología, destaca que las arritmias vinculadas al síndrome del corazón festivo pueden aparecer en personas sin antecedentes cardiovasculares. Los síntomas incluyen palpitaciones rápidas y fuertes, dolor en el pecho, falta de aire o mareos. Estas condiciones, si no son tratadas, pueden derivar en complicaciones graves como un accidente cerebrovascular (ACV), ya que la fibrilación auricular facilita la formación de coágulos en el corazón que pueden viajar al cerebro.
Un estudio reciente publicado en el European Journal of Cardiology reveló que incluso un solo trago, como un vaso de vino o una cerveza, incrementa el riesgo de arritmias en un 16%, lo que subraya la importancia de moderar el consumo de alcohol, especialmente durante las festividades.
Cómo afecta el alcohol al corazón
El alcohol es una de las sustancias recreativas más consumidas en el mundo y, aunque su uso ocasional puede parecer inofensivo, el consumo excesivo puede tener efectos dañinos en el sistema cardiovascular. Según el doctor Barcos, el alcohol altera el equilibrio del sistema nervioso autónomo, modifica los niveles de electrolitos esenciales como el potasio y el magnesio, y genera inflamación y estrés oxidativo en las células cardíacas.
A largo plazo, el consumo crónico puede derivar en condiciones más graves, como hipertensión arterial, miocardiopatía alcohólica, arritmias recurrentes y riesgo de muerte súbita cardíaca.
Quiénes están en mayor riesgo
Aunque el síndrome puede afectar a cualquier persona, el riesgo aumenta en aquellos con antecedentes de enfermedades cardiovasculares, como insuficiencia cardíaca o miocardiopatías. También influyen factores genéticos, ya que algunas personas presentan predisposición a sufrir arritmias incluso con ingestas moderadas de alcohol.
Además, el consumo temprano de alcohol, frecuente entre adolescentes, agrava los riesgos. Según la Tercera Encuesta Mundial de Salud Escolar, en Argentina el 77% de los adolescentes comienza a consumir alcohol desde los 13 años, un factor preocupante dado que el metabolismo del alcohol en esta etapa es menos eficiente, aumentando la probabilidad de complicaciones graves como el coma etílico.
Prevención: cómo evitar el síndrome del corazón festivo
La prevención pasa principalmente por moderar o evitar el consumo de alcohol, especialmente en contextos festivos. El doctor Barcos recomienda seguir estas pautas:
- Limitar las bebidas estándar: los hombres no deberían superar dos tragos por día y las mujeres, uno.
- Evitar atracones alcohólicos: el consumo excesivo en poco tiempo es el principal detonante del síndrome.
- Mantenerse hidratado: alternar alcohol con agua puede minimizar efectos adversos.
- Evitar beber con el estómago vacío: consumir alimentos, especialmente aquellos ricos en grasas, ralentiza la absorción del alcohol.
- Consultar a un médico: quienes tienen antecedentes de arritmias u otros problemas cardíacos deben buscar asesoramiento médico antes de las celebraciones.