Un estudio reciente advirtió que la radiación cósmica durante un viaje a Marte podría causar daños permanentes a los riñones de los astronautas. Publicado en la revista Nature Communications, los resultados sugieren que los riñones de un astronauta pueden verse severamente afectados. Específicamente, en un viaje de ida y vuelta a Marte, que tomaría hasta tres años.

Keith Siew, del Departamento de Medicina Renal del Colegio Universitario de Londres, indicó que los experimentos con ratones de laboratorio, expuestos al equivalente de 2,5 años de radiación galáctica, mostraron daños permanentes y pérdida de función renal. «Si no desarrollamos nuevas formas de proteger los riñones, yo diría que aunque un astronauta podría llegar a Marte, podría necesitar diálisis en el camino de regreso«.

Problemas conocidos y nuevos hallazgos

Hasta ahora, se sabía que los astronautas experimentan el desarrollo de cálculos renales y otros problemas de salud como la pérdida de masa ósea y el debilitamiento del corazón durante las misiones espaciales. Sin embargo, se pensaba que estos problemas surgían debido a la acumulación de calcio en la orina. Como resultante de la pérdida ósea en condiciones de ingravidez.

El estudio reciente, que incluyó muestras de más de 40 misiones espaciales y 11 simulaciones terrestres, descubrió que los riñones humanos y animales se ven alterados por las condiciones espaciales, reduciendo las estructuras que mantienen el equilibrio de calcio y sal después de menos de un mes en el espacio.

Stephen Walsh, investigador sénior del estudio, señaló: «Nuestro estudio resalta el hecho de que si se planea una misión espacial, los riñones realmente importan«. Añadió que, aunque no se puede proteger a los riñones de la radiación galáctica con blindaje, podrían desarrollarse medidas tecnológicas o farmacéuticas para facilitar los viajes espaciales prolongados y cuidar la salud.