Efectivos de la Dirección de Drogas Peligrosas (Didrop) Capital realizaron diferentes allanamientos en Capital. Las viviendas investigadas pertenecían a un mismo clan familiar que se dedicaba a la venta de estupefacientes. La medida se inició gracias a la denuncia de vecinos. Los operativos tuvieron lugar en los barrios San Carlos, San Miguel y San Bernardo. Cinco personas fueron aprehendidas por infracción a la Ley 23.737 de Estupefacientes. Durante el operativo se secuestraron 50 bochitas y 90 ravioles de cocaína, cigarrillos de marihuana y otros elementos vinculados a la comercialización de sustancias prohibidas.

“Siguiendo los lineamientos del Ministerio de Seguridad y del Comando Superior Institucional, en la fecha se llevaron a cabo tres medidas de allanamientos en el ámbito capitalino. Una en un domicilio del barrio San Miguel, otra en el barrio San Bernardo y la tercera en el barrio San Carlos, logrando la aprehensión de cinco personas y el secuestro de cocaína y marihuana, dinero en efectivo y documentación de interés para el causa”, detalló el comisario principal Sergio Juárez, de la Didrop Capital, quien supervisó las medidas judiciales que fueron ordenadas por el juez Guillermo Taylor y requeridas por el fiscal José Sanjuan, a cargo de la Unidad Fiscal de Narcomenudeo Capital.

Denuncia de vecinos

El subcomisario Pablo Abad Ortiz, de la sección Inteligencia de la Didrop Capital, brindó detalles de la investigación. «Surge a partir de la denuncia de vecinos de la zona quienes alertaban que en esta vivienda se estaban comercializando estupefacientes, por lo cual se da intervención a la Unidad Fiscal de Narcomenudeo cargo el doctor San Juan, quien mediante oficio nos autorizó a realizar una investigación en el domicilio. Es así que un equipo de esta sección de Inteligencia se hace cargo de la investigación y logra demostrar que en esta vivienda llegaban jóvenes de la zona y de barrios aledaños, y hacían intercambio de dinero por pequeños envoltorios que eran estupefacientes”, explicó.

Red familiar

“A medida que se avanzó en la pesquisa, el personal policial pudo determinar que había otros domicilios ligados a esta vivienda. Se trata de un grupo familiar que vivía en otras casas donde también se estaban dedicando a la comercialización de sustancias prohibidas. Es así que se solicitaron los allanamientos en los tres domicilios que pertenecerían a la misma familia. Hubo resultados positivos con el secuestro de 50 “bochitas” y 90 ravioles de cocaína. También se incautaron elementos utilizados para el fraccionamiento de la sustancia como balanza de precisión y tijeras, además cigarrillos armados de marihuana, documentación y elementos de recortes varios, que servirán para el avance de la causa”, puntualizó Abad Ortiz.

“Fueron aprehendidas cinco personas mencionadas en la investigación: dos mujeres y tres hombres. Algunas ya tienen antecedentes por infracción al Ley de Estupefacientes N° 23.737. De esta manera se han desbaratado kioscos dedicados al narcomenudeo que tenían vinculaciones familiares. Se trata de primos, tíos, sobrinos, todos dedicados a la venta de narcomenudeo”, concluyó.