Una tensa negociación se lleva a cabo entre las empresas de consumo masivo con el Gobierno por los ajustes de precios. Los empresarios sostienen la necesidad de aumentar más tras la devaluación. Desde la Secretaría de Comercio avanzan en paralelo en discusiones con otros sectores que también deben renegociar la pauta de incremento hasta fines de octubre. El nuevo tope establecido por las autoridades (5%) en el programa Precios Justos no satisface al sector.

Son varios los rubros que habían firmado un congelamiento de precios hasta las PASO. Pasados los comicios, las empresas nucleadas en la Asociación de Fábricas Argentinas Terminales de Electrónica (AFARTE), incrementaron los precios hasta un 30%. En el caso de la Asociación, la convocatoria a negociar llegó con posterioridad a la suba de precios. Sin embargo, son recurrentes las exigencias oficiales para retrotraer aumentos. Esto motivó a la industria a mantenerse firme en una propuesta de suba de un 25% promedio.

Además, el sector reclama que se sostenga el programa Ahora 12. Cabe aclarar, que este programa les permite impulsar la venta a pesar del aumento en las tasas de interés. También exigen que el Gobierno cumpla con la autorización de las importaciones (SIRA) y el acceso al Mercado Libre de Cambios (MULC). En búsqueda de concretar los pagos de compras al exterior, cuando van venciendo los permisos.

La situación de las reservas del Banco Central (BCRA) es cada vez más crítica. Esto llevaría a una situación en que el Gobierno ya no estaría en condiciones de ofrecer las SIRAs, si adhieren al acuerdo de precios. En el pasado, prometieron lo mismo en la renovación de Precios Justos y no pudo cumplir.