A medida que comienza a acercarse la etapa de definiciones electorales, los candidatos opositores dejan entrever sus planes. En especial, sus intenciones reales en materia económica; y uno de los puntos más hablados es una posible dolarización de la economía. «Se puede aplicar, pero el tema es el impacto que tendría», detallaron expertos. Los últimos países que tomaron medidas similares fueron Ecuador y Panamá.

Tanto Patricia Bullrich, precandidata del PRO; como el libertario Javier Milei, parecen ir en búsqueda de un esquema ‘ultraneoliberal’. Quienes se encuentran en contra, apuntan que esto provocaría una ‘megadevaluación’, desregulación masiva y privatizaciones. Además, de la consiguiente caída del salario y del empleo.

Milei insiste con la idea de la dolarización para terminar con el problema de la inflación. La pérdida de la soberanía monetaria iría acompañada por el «cierre» o la reducción a su mínima expresión del Banco Central (BCRA). «Lo real es que Argentina tiene muy poco dólares. Porque es muy fácil prometer dólares, pero de dónde saldrían después«, expresó el economista Andrés Asiain a LV12.

En este sentido, «si no hay dólares suficientes, la forma que queda es devaluar los sueldos de los argentinos de tal manera que, con lo pocos dólares que hay, alcance para dolarizar«. Otra posibilidad es «la convertibilidad. Sin embargo, cuando se aplicó hubo una hiperdevaluación en el marco de la hiperinflación y un plan Bonex que confiscó depósitos», detalló Asiain.

Para finalizar, el economista sostuvo que un punto a favor. Y es que «la moneda equivale a una de reserva y, cuál es la causa principal de la pérdida de valor: la permanente devaluación. Entonces si no hay una moneda nacional, nunca se va a devaluar. El dólar va a ser siempre dólar».