Andrea ya no sabe qué hacer. Desde que recibió la notificación que la afectaría a ser autoridad de mesa durante las paso, no vive ni un día de tranquilidad.

Es una joven madre que tenido a su bebé hace poco más de seis meses, la base de su alimentación es la teta y no puede ausentarse de su lado doce horas consecutivas. «No puedo dejar a mi bebé ni llevarla conmigo, exponerla en una escuela en tiempos de pandemia. De verdad no puedo”, explica Andrea según publica la Revista Urbana.

Aunque la vía de contacto con la Junta Electoral es a través de whatsapp, le dijeron que necesitaba presentar un certificado de lactancia de un hospital público, cuando consultó adónde lo tenía que presentar no recibió respuesta. Como si fuese poco ser madre y laburante, pudo llegar a la sede de la Junta electoral donde no recibió más que desinterés del personal.

“Me dice: ‘Sabés que tenés que resolver todo por WhatsApp’. Le explico que no me respondieron y le insisto: ‘No puedo ir yo el domingo’. Y aquí es cuando encima me han cuestionado: me dicen que son mis obligaciones, que no puedo faltar y me dice: ‘Le vas a tener que decir a tu marido que te la lleve cada vez que tenga hambre’. O sea: primero dieron por sentado que tengo marido y no puedo ser madre soltera. Dos: dando por sentado que mi marido tiene vehículo y no trabaja ese día. Me insisten con que lo tengo que hacer por WhatsApp», relato la madre.

Lo más indignante fue que le dijeron que vaya a hablar con el Presidente para resolver su problema: ‘No sé, mamita, hablá con el Presidente’.

Sin embargo, empieza otro peregrinaje para Andrea: conseguir un certificado médico. Fue a buscar la justificación al Hospital Padilla donde inauditos le preguntaron: “¿Cómo te voy a dar un certificado que estás amamantando?”. En el Hospital Kirchner relató que la atiende una enfermera y me dice ante mi consulta: ‘¿No es obvio que no podés ir?’. Con la cara me decía todo.

Parece que resulta obvio para todo el mundo menos que para los empleados de la Junta Electoral. Y le dijo: ‘¿Que los datos de la Anses no son suficientes? Ante tal situación, solo le quedaba el Caps de Villa Alem. Aunque por WhatsApp le habían dicho que no podía ser, pero fue el último recurso. Allí el ginecólogo dijo: “Yo le puedo hacer un certificado, pero es certificar que ha parido”.