La epilepsia es un trastorno crónico del sistema nervioso central que provoca crisis recurrentes, convulsivas o no, y afecta a millones de personas en todo el mundo. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor de 50 millones de personas padecen epilepsia, y se estima que cada año se suman dos millones de nuevos casos. Este trastorno puede presentarse en cualquier etapa de la vida, pero es más común en la infancia y la tercera edad.

Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la epilepsia es un trastorno cerebral no transmisible que afecta a personas de todas las edades. Las crisis epilépticas se producen por una actividad anormal y transitoria de las neuronas, y aunque suelen durar solo unos segundos, pueden ser perturbadoras. Entre los factores desencadenantes más comunes se encuentran la falta de descanso, el estrés, los ciclos menstruales y el consumo excesivo de alcohol.

En caso de presenciar una crisis, es importante mantener la calma y proteger la cabeza de la persona para evitar golpes. Colocarla de costado también es recomendable, pero no es necesario intentar abrir su boca, el mito de que puede tragarse la lengua es falso. Luego de la crisis, es importante dar tiempo para que el paciente se recupere.

Cuando las crisis se agrupan, conocidas como clústeres, o cuando el paciente sufre múltiples crisis en un solo día, se recomienda acudir de inmediato a una sala de emergencia, ya que podría tratarse de un estado epiléptico, una condición peligrosa que requiere atención urgente.

Existen tratamientos de rescate que se utilizan en episodios de crisis agrupadas y pueden administrarse en el hogar. Estos tratamientos, recetados por un profesional, suelen incluir medicamentos de la familia de las benzodiazepinas, que pueden aplicarse por vía rectal, sublingual o nasal. En Argentina, ya está disponible un spray nasal de diazepam. Tratamiento de fácil uso y alta efectividad para resolver crisis en casa, sin necesidad de acudir a una sala de guardia.