Recientemente, una empresa de ciberinteligencia alertó sobre el robo de más de 80.000 claves fiscales de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP). Es importante aclarar que estas claves no fueron obtenidas directamente de la base de datos de la AFIP, sino que fueron robadas a los usuarios mediante distintos métodos y luego consolidadas en una base de datos que circula en la «dark web».

La cuenta Birmingham Cyber Arms informó sobre la filtración de 82.000 claves fiscales, señalando que la maniobra delictiva no involucra una filtración directa desde la AFIP, sino que está relacionada con cientos de miles de credenciales robadas a los usuarios y recopiladas en una base de datos que ahora circula en internet.

Cómo prevenirse

Ante la notificación de la filtración de contraseñas de claves fiscales de la AFIP, se recomienda que cada usuario realice la modificación de su contraseña. Las contraseñas filtradas en la dark web son descritas como muy simples y predecibles. A continuación, se detallan las características recomendadas para la contraseña y sugerencias de seguridad:

Características de la contraseña de la clave fiscal de la AFIP

  • Dos caracteres numéricos.
  • Cuatro letras.
  • Longitud mínima de diez caracteres.
  • Una minúscula.
  • Una mayúscula.

Sugerencias

  • No utilizar la misma contraseña en otros casos.
  • Evitar el uso de datos personales.
  • Utilizar números en lugar de letras.
  • Crear una fórmula propia para contraseñas.
  • Utilizar un administrador de contraseñas.
  • Que la contraseña tenga 12 dígitos en adelante.
  • Modificar la contraseña mensualmente, aprovechando para actualizar otras contraseñas de organismos como AGIP, ARBA, etc., siguiendo los lineamientos de cada entidad.

Este incidente resalta la importancia de mantener contraseñas seguras y adoptar prácticas de seguridad digital. La ciberdelincuencia ha aumentado su sofisticación y alcance, por lo que es esencial estar alerta y tomar medidas preventivas para proteger la información personal.

Además, plataformas en la clandestinidad, como la dark web y las de mensajería cifrada, continúan siendo puntos clave para la ciberdelincuencia. Es fundamental desarrollar soluciones que anticipen ciberataques y permitan reconocer actividades maliciosas en estas áreas de la red.