Ante un importante número de diputados y senadores, el presidente Javier Milei presentó anoche el proyecto de Presupuesto 2025 en el Congreso de la Nación. El mandatario elaboró una proyección de equilibrio fiscal que denominó «cepo al Estado”. Según el jefe de Estado, el Gobierno buscará «blindar el equilibrio fiscal sin importar cuál sea el escenario económico”. «Desde ahora, Argentina será solvente. Bajará el riesgo país, tasa de interés, con mayor inversión, productividad, salario real, caída de pobreza y de indigencia”, aseguró Milei ante oficialistas y opositores. Bajo este criterio, el Ministerio de Economía que dirige Luis Caputo, deberá lograr un superávit primario de 1,5% para cubrir los intereses de deuda y equilibrar las cuentas públicas.

Superávit primario

De este modo, se necesitaría 1,5% del PBI de superávit primario para poder sostener el equilibrio financiero. Para esto se deberán recortar partidas de gasto ante ciertas contingencias dejando fuera de la discrecionalidad únicamente a las jubilaciones, que continuarán con una fórmula de actualización mensual automática sobre la base inflacionaria. Con esto, el equipo económico busca establecer un límite presupuestario «en función de las prioridades de políticas públicas establecidas”. Para el cálculo se tuvo en cuenta los intereses de deuda a pagar a lo largo de 2025.

“Durante 2025, se plantea garantizar nuevamente el equilibrio fiscal para corregir definitivamente los desajustes y sostener las condiciones de estabilidad macroeconómica que permitan, junto con las reformas aprobadas por el Congreso en la Ley Bases y el DNU 70/2023, el despegue definitivo de las potencialidades productivas del país, generando un ambiente favorable para el incremento de la inversión privada, una mejora de la productividad, y el crecimiento de la actividad, del empleo y los ingresos”, señaló Milei en el resumen del proyecto.

Baja de impuestos

En ese sentido, ejemplificó: “En caso de que el crecimiento del nivel de actividad genere una recaudación mayor a la estimada, el excedente de estos recursos se destinará a la baja de impuestos. Esto implicará que por segundo año consecutivo el Sector Público Nacional no necesitará financiamiento por la vía de endeudamiento o emisión monetaria ya que no habrá desbalances de las cuentas públicas, que a lo largo de la historia argentina ha derivado en recurrentes crisis de deuda o escenarios de hiperinflación”, planteó Milei.

Jubilados

Las jubilaciones tendrán un gasto equivalente a 6,3% del PBI y otro 2,6% del Producto para asistencia social, entre otros. No obstante, el Gobierno anunció ajustes en caso de que las variables macroeconómicas no sean las proyectadas en el presupuesto. Ante dicho escenario, “se ajustará el gasto discrecional para garantizar el equilibrio financiero o se incrementará el ahorro fiscal”.

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