Según estimaciones oficiales y privadas, podrían ingresar hasta USD 12.000 millones de diferentes sectores en los próximos meses. Pese a las alertas por las reservas para el próximo año frente al vencimiento de deudas. En ese sentido, aseguran que 70% de la cosecha de soja aún está sin venderse, algo que podría incidir positivamente en las reservas del Banco Central. Además, la entidad proyecta un ingreso neto de unos USD 2.500 millones por las exportaciones de energía. La entidad monetaria retomó su compra de divisas y se enfoca en la fuente de dólares para el 2025.

Tanto el ministro Luis Caputo como el titular del Banco Central, Santiago Bausili, señalaron que este mes se revertirá el impacto de las importaciones de energía en el balance cambiario. Según datos oficiales, se espera un superávit energético de unos USD 5.000 millones para el 2024. Al primer semestre, se habían consumado poco más de USD 2.700 millones, aunque el ritmo probablemente se haya reducido en julio, con la importación de energía para el mes de mayor frío. La proyección indica que en los últimos cuatro meses del año podrían ingresar otros USD 2.500 millones.

A esta cifra se sumaría ingresos provenientes de créditos por parte de organismos multilaterales. También impactaría en las reservas brutas el blanqueo de capitales por el aumento de los encajes, entre ellos los correspondientes a los depósitos en dólares del sector público en los que se acumularían unos USD 2.000 millones por la recaudación que generaría el plan. Se espera que la mayor parte de esa monto ingrese antes de octubre.

Energía

El equipo económico tiene proyecciones ambiciosas respecto a la energía. Para 2025 se prevé que los ingresos netos de dólares crezcan al menos 50% (entre USD 7.500 y USD 8.000) y que superen el doble de eso hacia el 2026. Este ingreso de dólares estaría acompañado de fuertes inversiones en el sector. De acuerdo a la presentación del BCRA, en los próximos dos años ingresarían USD 12.000 millones invertidos en proyectos de gas, petróleo, biocombustibles y petroquímicos, más aquellas inversiones cuyos plazos se extienden más allá de 2027, que también comenzarán a dejar ingresos el próximo año.

Campo

El foco principal del Gobierno está puesto en el campo. En ese frente hay una luz de alerta para 2025 dado la caída del precio de los granos, que restarían unos USD 6.000 millones al mercado. Pero para lo que queda de 2024 algunos cálculos privados, basados en fuentes de la industria cerealera, indican que el agro todavía podría ingresar hasta USD 10.000 millones. El cálculo surge de la misma industria. Según las consultora MAP. «el 70% de la soja aún está por venderse, y no más de 30% de la misma se retendría para su comercialización durante la próxima campaña”.