El uso de tarjetas de crédito registró un notable incremento del 170% en mayo, comparado con el mismo mes del año anterior. Sin embargo, este aumento no se traduce en un crecimiento del consumo general, que sigue en caída. Según la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) y especialistas en logística de distribución, la facturación ha caído hasta un 23%. Lo que evidencia una fuerte retracción en el consumo a pesar de la desaceleración de la inflación.

En mayo, las operaciones con tarjetas de crédito alcanzaron los $7.877.139, lo que representa un aumento del 170,8% interanual. A pesar de este incremento, el consumo sigue en caída, ya que el aumento en el uso está por debajo de la inflación acumulada. Lo que indica que la gente usa más las tarjetas, pero compra menos en términos reales.

Luis Caputo, ministro de Economía, había afirmado que «lo peor ya pasó», señalando una recuperación desde marzo y abril. Sin embargo, al comparar las cifras con abril de este año, se observa un crecimiento del 9,2% en las ventas con tarjetas de crédito, superando la inflación esperada para el periodo. Este dato fue proporcionado por el informe de First Capital Group.

Guillermo Barbero, de First Capital Group, destacó que este es el segundo mes consecutivo de alza real, impulsado por la creciente oferta en cuotas. Cada vez más comercios se suman a programas como Cuota Simple, ofreciendo financiamiento con y sin intereses. Barbero también señaló la reaparición de planes con hasta 12 cuotas, lo cual contribuye a la recuperación de las carteras de crédito.

El informe subrayó que el consumo en dólares con tarjetas de crédito tuvo una suba interanual del 65,1%, aunque con un comportamiento mensual irregular. En mayo, se registró un aumento del 10,2% en comparación con el mes anterior, alcanzando un total de USD 464 millones. Según Barbero, los saldos de cartera están acercándose a los niveles previos a la pandemia, lo que podría indicar una normalización en la operativa financiera.