La Argentina enfrenta una nueva demanda en la Justicia de los Estados Unidos por un monto de USD 1.300 millones. En esta ocasión, la disputa se generó debido a la controversia generada por el «Cupón PBI». Fondos de inversión acusan al gobierno de Cristina Kirchner, de haber manipulado estadísticas oficiales con el objetivo de evitar pagos relacionados con estos cupones. La presentación judicial, encabezada por Aurelius Capital y otros fondos, busca reabrir el caso tras la desestimación inicial por cuestiones técnicas en abril de este año.

Los demandantes argumentan que la modificación del cálculo del Producto Bruto Interno (PBI) en 2013, realizada por el entonces ministro de Economía, Axel Kicillof, perjudicó a los acreedores que tenían bonos vinculados al crecimiento económico de Argentina. Los fondos sostienen que si no se hubieran alterado estos datos, habrían recibido pagos correspondientes a los años 2014-2018, así como en 2021 y 2022. La jueza Loretta Preska no se pronunció sobre el fondo del asunto y la nueva demanda busca reactivar el juicio con correcciones técnicas.

El caso también tiene repercusiones en el Reino Unido, donde Argentina enfrenta una demanda adicional de USD 1.500 millones. La Corte Suprema británica podría dictaminar próximamente sobre este reclamo, lo que pondría aún más presión sobre las finanzas del país. El gobierno argentino ya ha depositado una garantía de USD 337 millones para cubrir posibles fallos adversos.

Los antecedentes del conflicto se remontan a los canjes de deuda realizados en 2005 y 2010. En ese momento, el gobierno kirchnerista emitió cupones atados al crecimiento del PBI. Estos instrumentos estaban diseñados para activarse cuando el crecimiento económico superara el 3,2% anual. Sin embargo, los demandantes alegan que las modificaciones del cálculo del PBI impidieron que se cumplieran las condiciones necesarias para el pago de los cupones, generando así pérdidas para los inversores.