El Gobierno nacional, a través de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT), anunció una serie de medidas con el objetivo de reducir los precios de los medicamentos en el país. La iniciativa, oficializada mediante su publicación en el Boletín Oficial, busca fomentar la producción nacional y aumentar la competencia en el sector farmacéutico, con especial énfasis en tratamientos esenciales, como los oncológicos.

Uno de los pilares clave de esta estrategia es la promoción de la producción de medicamentos biosimilares, que representan una alternativa más accesible frente a los fármacos biológicos originales. Según fuentes oficiales, estos medicamentos pueden reducir significativamente los costos sin comprometer la calidad, seguridad ni eficacia del tratamiento.

Un caso concreto que refleja el impacto de estas medidas es el del pembrolizumab, un medicamento utilizado en terapias contra el cáncer. La introducción de un biosimilar, desarrollado por el laboratorio Elea, permitió una reducción del 60% en su precio. Este tipo de avances no solo benefician a los pacientes, sino que también alivian la carga financiera del sistema de salud pública.

Qué son los medicamentos biosimilares

Los medicamentos biosimilares son versiones de fármacos biológicos cuyos principios activos mantienen una similitud con la fórmula original, pero sin estar protegidos por una patente vigente en Argentina. Una vez que la patente del medicamento original expira, otros laboratorios pueden fabricarlos, siempre bajo estrictas regulaciones de seguridad y eficacia establecidas por la ANMAT.

Para facilitar su acceso, el Gobierno simplificó los procedimientos para la aprobación de estos productos, lo que permitirá a laboratorios nacionales e internacionales producir y comercializar estos fármacos a precios más accesibles.

Acceso a medicamentos y cobertura gratuita

Además de fomentar la competencia y reducir costos, el plan contempla la distribución gratuita de ciertos tratamientos para pacientes en situaciones de vulnerabilidad. A través de distintos programas de salud pública, el Gobierno busca garantizar que las personas sin cobertura médica o con recursos limitados puedan acceder a los medicamentos esenciales sin costos adicionales.

Esta política se enmarca en un esfuerzo por hacer el sistema de salud más equitativo, asegurando que el acceso a tratamientos fundamentales no dependa exclusivamente de la capacidad económica de los pacientes. Con la implementación de estas medidas, el Gobierno apunta a fortalecer la producción nacional, generar un impacto positivo en la industria farmacéutica y aliviar la carga financiera del sistema de salud.