La defensa de Marisol sospecha de posible borrado de pruebas
Tras la muerte de Marisol Frías, la joven que había sido internada para una intervención laparoscópica ginecológica en el Sanatorio Parque, todo es incertezas en el nosocomio.
Además del trágico desenlace, empleados del sanatorio denunciaron que durante la madrugada fueron agredidos por el Dr. Alberto Agote, quien ingresó al nosocomio alrededor de las 2:30 h «con guantes de látex y un arma de fuego», según consta en la denuncia policial realizada.
La abogada de la familia, Dra. Cristina Robles, manifestó su preocupación por la situación ya que señaló que «es absolutamente raro que haya ingresado en ese horario con guantes de látex, como si fuera a borrar pruebas». Al mismo tiempo resaltó que a la familia le llama la atención la velocidad con la que el Cucai concurrió al nosocomio, «para realizar una ablación que nadie solicitó».
Aún, ni el directorio del Sanatorio Parque ni el Ministerio de Salud emitieron comunicados sobre la escandalosa situación y mantienen la hermeticidad. La Dra. Robles sostiene que es «vergonzoso que aún no se haya apartado de su cargo de director de la Maternidad al Dr. Agote», quién fue el responsable de la cirugía de Marisol y la cabeza del equipo que intervino a la joven.
La causa recaerá en el fiscal de la I Instancia, Claudio Bonari, y se espera sea bajo la carátula de homicidio grave, sumado a la tentativa de homicidio por las amenazas a los trabajadores del sanatorio.
La letrada informó que esperan respuestas sólidas sobre el porqué de la muerte de la joven, ya que la única comunicación que tuvieron por parte del personal – previo al deceso de Marisol – fue: «Algo pasó, está muy grave».