La Policía realizó hoy cuatro allanamientos y detuvo a dos sospechosos de haber participado en el ataque a una mujer embaraza en la intersección de avenida Siria y Bolivia, durante el temporal del sábado pasado. Tras realizar una investigación del caso, la Policía realizó cuatro allanamientos en la zona donde se cometió el atraco. Los presuntos asaltantes de 18 y 22 años quedaron detenidos, a disposición de la Fiscalía de Robos y Hurtos III. Del episodio participaron al menos diez personas más que aún no fueron identificadas. La Policía anticipó que habrá más detenciones.

El comisario Gabriel Heredia, jefe de la División Robos y Hurtos brindó detalles de los procedimientos que se realizaron esta mañana. “Debido a un robo que ocurrió el 8 de marzo en horas del mediodía, donde a consecuencia de la tormenta de gran magnitud de ese día, un grupo de delincuentes; aprovechándose del gran caudal de agua que obstaculizaba las calles; interceptaron una camioneta Amarok color blanca que era conducida por una mujer embarazada. Los malvivientes rompieron la ventanilla y la despojaron de múltiples objetos personales y de valor”, precisó Heredia.

La Fiscalía ordenó medidas judiciales de allanamiento y detención que se ejecutaron desde muy temprano. Según precisó el jefe policial, uno de los detenidos posee antecedentes por robo con la modalidad arrebato. Heredia señaló también que durante la jornada continuarán con medidas judiciales y adelantó que se concretarán más detenciones en el transcurso del día.

Un suceso desesperante

Florencia Caballero (33), víctima del violento ataque, relató días atrás el mal momento que le tocó vivir. «Bajé por Catamarca y Bolivia, casi Siria. Ya había pasado el temporal fuerte, pero las calles estaban inundadas», señaló. En ese momento, mientras la camioneta estaba sin movimientos aparecieron los delincuentes quienes aparentando brindar ayuda se acercaron a la camioneta. Según el relato de la víctima, los sujetos la amenazaron con un arma de fuego. «Eran entre 10 y 15 personas. Me sacaron una pistola: ‘Bajá el vidrio, bajáte, te voy a quemar’, me decían. Doblo en U, casi choco con una casa e intento volver en contramano, pero el agua me llena de frente, la camioneta muere y ahí supe que me iban a hacer de todo», contó.

«Tiraron cascotazos, ladrillos, palos. No sé de dónde sacaban todo tan rápido. Me dieron la cabeza contra el vidrio, me golpearon con un casco y con un cascote enorme que todavía está en la camioneta. Esos golpes me generaron el politraumatismo que hoy me afecta. No solo ingresan y me roban la cartera, las tarjetas y el poco dinero que tenía. Me golpeaban mientras exigían más plata. Me arrancaron mechones de pelo. Ahora no puedo ni lavarme el cabello porque el dolor es angustiante. La higiene básica es algo que no puedo implementar hoy», relató a prensa.