Arritmia: cuál es la alimentación recomendada para una persona que padece este trastorno
La arritmia, un trastorno que afecta el ritmo cardíaco, se clasifica en dos grupos: benigna, con bajo riesgo de muerte, y maligna, que puede causar daño estructural al corazón. La alimentación juega un papel clave en el manejo de este trastorno, especialmente para aquellos con arritmias malignas.
El trastorno se manifiesta con ritmos cardíacos irregulares. Detectarla es sencillo al tomar el pulso, ya sea en la muñeca o en el cuello. Un ritmo cardíaco alterado indica la presencia de arritmia. La Federación Española del Corazón sugiere una dieta cardiosaludable, evitando grasas saturadas, trans y colesterol. Se aconseja:
- Sustituir lácteos enteros por desnatados.
- Cambiar manteca por aceite de oliva virgen.
- Optar por carnes magras como pollo sin piel en lugar de carnes grasas.
- Evitar embutidos, yema de huevo, fritos comerciales y bollería industrial.
El aceite de oliva, rico en grasa monoinsaturada, es esencial en una dieta cardiosaludable. Los ácidos grasos omega 3, presentes en pescados azules, ofrecen beneficios para la salud cardiovascular. Se recomienda también inlcuir alimentos ricos en magnesio, como frutos secos, cereales integrales y legumbres, es vital. La deficiencia de magnesio aumenta el riesgo de arritmias. A su vez, evitar el consumo de café, té, bebidas alcohólicas, energéticas y refrescos con cafeína, ya que pueden desencadenar arritmias.
Al comprar alimentos, es crucial revisar detenidamente el etiquetado. Optar por productos con bajo contenido de grasa total, grasa saturada y colesterol. Preferir métodos de cocción con poco o ningún agregado de grasa, como horno, plancha, parrilla, microondas, asado o cocción al vapor. Aunque un estudio reciente no asoció significativamente el café con arritmias, se recomienda moderación, especialmente para aquellos con arritmias.
En resumen, una dieta cardiosaludable, rica en alimentos específicos y baja en grasas perjudiciales, desempeña un papel crucial en el manejo de las arritmias cardíacas. Consultar con un profesional de la salud para obtener pautas personalizadas es fundamental.