En la tarde de ayer, se logró la aprobación en general de la Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos. También conocida como «Ley Ómnibus» o «Ley de Bases», en la Cámara de Diputados. Ahora, el proceso legislativo continuará con la votación en particular de los artículos. Este se llevará a cabo a partir del próximo martes y es crucial, ya que varios artículos podrían ser rechazados. Tal y como sucedió con el capítulo fiscal que se retiró en los últimos días.

La aprobación en general no garantiza la misma suerte para todos los artículos. En este escenario, las negociaciones entre el Gobierno y los bloques dialoguistas serán esenciales para superar las discrepancias existentes. Por ejemplo, en aspectos como las facultades delegadas, las privatizaciones de empresas públicas o la extensión del Impuesto PAIS.

Si los artículos son aprobados en particular, el proyecto con media sanción pasará al Senado, donde se podrá aprobar, rechazar o devolver con correcciones. En caso de devolverse con modificaciones, si Diputados acepta dichas correcciones, el texto se sancionará aprobado en la cámara revisora (Senado). Si no hay acuerdo, será necesario alcanzar la misma mayoría de 144 votos o una superior en Diputados para que se sancione el texto original.

Una vez que ambas cámaras sancionan el proyecto de ley, este pasa al Poder Ejecutivo. El Presidente de la Nación tiene la opción de aprobar y promulgar la ley. Ya sea por medio de un decreto o mediante «promulgación de hecho», si no se pronuncia pasados diez días hábiles. La otra opción es vetar la ley, de forma total o parcial y, en caso de vetos parciales, el presidente puede promulgar la parte no vetada que no desvirtúe el espíritu del proyecto sancionado por el Congreso.