Si bien los argentinos son reconocidos en todo el mundo por diversos elementos como el fútbol, el tango y los argentinos mismos; la carne nacional seguramente estaría en el podio. Esta, a su vez, es uno de los motivos por el que el argentino y su carnicería preferida forman un vínculo especial, donde la calidad y el precio son una ecuación fundamental.

Por eso, desde VOVE Tucumán nos comunicamos con Simón Poliche, dueño de la carnicería Finca San Ramón, de Yerba Buena, quien contó los motivos del éxito del local y por qué los clientes hacen fila para comprar ahí.

Una carnicería con Marca Tucumán

Ubicada en av. Solano Vera 102, la carnicería está rodeada de otros locales del rubro. Sin embargo, Finca San Ramón es la elegida para cada asado y milanesa familiar. “Hay mucha competencia de carnicerías, en la avenida, hay como quince”, detalló. “Hoy se compite por el mejor precio, calidad, atención y limpieza, en los cuales nos estamos destacando gracias al trabajo que venimos realizando hace tiempo”, explicó Simón.

La carnicería cuenta con todos las certificaciones provinciales y municipales, no obstante, “el certificado más importante es el que te da el cliente con su aprobación”, agregó el empresario. Además, es de las pocas carnicerías que posee el sello de calidad de Marca Tucumán, “lo cual nos enorgullece muchísimo”, apreció.

“La carne sigue siendo más barata que otras cosas”

Como todos los emprendimientos, Finca San Ramón está atada a la situación económica del país. Es como “una montaña rusa”, dijo Poliche. “Creemos que estamos bien hasta que sucede algo nuevo y nos encontramos abajo. Entonces tenemos que volver a organizar las piezas para seguir adelante”, detalló. “Se nota que el consumo bajó, pero es hasta que se acomoda el bolsillo”, agregó.

Pese a las complicaciones, los argentinos y el asado mantenemos relaciones carnales muy difíciles de eludir y nuestra provincia no es la excepción. “El consumo de carne en Tucumán está muy marcado por el asado, las milanesas y las hamburguesas. Siempre está el grupo de amigos que les gusta cortar la semana, y las milanesas en la mesa son infaltables”, “la carne es sinónimo de encuentro”, describió a la perfección el emprendedor.

Asimismo, como es bien sabido, hay un corte de carne para cada gusto y aunque nos encontramos en una economía inflacionaria, “la carne sigue siendo más barata que otras cosas”, aseguró Simón. “¿Cuánto cuesta un kg de helado de marca reconocida, una pizza en un bar o una hamburguesa en una cadena? Cuando comparamos esto con la carne, está muy por debajo de esos precios. Nosotros tenemos algunos cortes por debajo de los $1.000”.

Continuando con los cortes, desde Finca San Ramón detallaron que “lo que más se vende son las costillas, el vacío y la nalga”, aunque también hay cortes de moda, como “la picana y la entraña” que se pueden reemplazar por sus pares, más económicos como “la colita de cuadril o la costeleta gruesa, que, a la parrilla, su hueso y la grasa le da un sabor inigualable”. Por último, invitó a todos en av. Solano Vera 102 de Yerba Buena “para acompañarlos en sus compras y que saboreen la mejor carne a un excelente precio”.