La Fundación Fundar ha revelado que Argentina sigue siendo uno de los países con la ropa más costosa en Latinoamérica. Ante esta situación, la entidad propone una transformación integral de la industria textil e indumentaria basada en tres ejes centrales para garantizar su sustentabilidad económica y social.

Según el análisis de Fundar, una canasta de prendas en Argentina cuesta casi un 40% más en comparación con el promedio de los países de la región. Este elevado costo se debe a la presión impositiva. Además, también a una combinación de factores como el marcado proteccionismo, la inestabilidad cambiaria y macroeconómica, y una disminución en la productividad. Estos elementos generan tensiones entre el empleo, la formalidad, la competitividad y los precios dentro de la industria textil e indumentaria.

Propuestas para mejorar la competitividad

Para enfrentar estos desafíos, Fundar propone tres ejes principales:

  1. Revisión integral del esquema de comercio exterior: reducir al mínimo los aranceles de importación de insumos y productos que no se fabrican en Argentina o cuya producción es insuficiente para satisfacer la demanda local. Además, priorizar la reducción de aranceles en productos con sobreprecios significativos respecto a la media regional.
  2. Incentivos para mejorar los niveles de competitividad y formalización: implementar políticas que promuevan prácticas productivas eficientes. Que mejoren la formalidad laboral, la calidad y el cumplimiento de estándares ambientales en la industria.
  3. Integración socioproductiva: fomentar la colaboración entre los distintos actores del sector para impulsar un desarrollo sostenible y equilibrado.

Asimismo, Fundar sugiere eliminar el Impuesto PAIS a la importación, actualmente del 7,5%. Y es que encarece tanto los productos importados como la producción nacional que utiliza insumos extranjeros. Se destaca que, para diciembre, cuando venza su plazo de vigencia, se prevé que esta percepción sea eliminada.