Tucumán amaneció ayer con una agradable e inusual visita. Cientos de miles de mariposas blancas migrantes llenaron de asombro a los tucumanos, que vieron el cielo adornado por este fenómeno natural. El enorme bivaque de mariposas ‘Ascia Monuste’ se pudo observar a alturas extremas, para luego descender en los verdes jardines de la ciudad. Si bien no es la primera vez que sucede, se trata de un acontecimiento poco habitual. La particular especie migratoria se dirige de norte a sur y Tucumán forma parte de su recorrido. Las actuales condiciones climáticas, marcadas por altas temperaturas y gran humedad, permitieron que la especie encuentre un lugar cómodo a su paso.

Adriana Chalup, doctora en biología y referente deI Instituto de Entomología de la Fundación Miguel Lillo, dialogó con VOVÉ Tucumán acerca de este increíble fenómeno que cautivó a muchos. «Comúnmente se los llama pirpintos o lecheras. Se habrán sorprendido al despertarse esta mañana y encontrar en sus jardines cientos de mariposas. Si se dan cuenta, vuelan a alta distancia. La especie en cuestión es Ascia Monuste, una mariposa de color blanquecino, blanco crema. Tiene sus antenas en forma de clava. En el extremo, se caracterizan por tener un tono turquesa, verdoso y tiene algunas sombras más oscuras, negruzcas en el borde de las alitas» describió la especialista.

«Es una mariposa que migra, no todos los años sino en años de temperatura y humedad especiales. Sabemos que esta primavera fue muy húmeda. Llovió muchísimo, no solo acá en Tucumán sino en otras regiones del NOA, también en Formosa y Chaco. Esto produjo la aparición de esta migración. Las mariposas vuelan cientos de kilómetros. La ola migratoria proviene Bolivia o inclusive de provincias de Argentina y se dirige hacia el sur. Va a pasar por Córdoba, por Santiago y va a llegar hasta Mendoza» explicó.

Más allá del atractivo fenómeno visual, la experta lepidopteróloga detalló el proceso de desplazamiento de esta especie y aclaró algunas leves implicancias que esta ola migratoria puede traer. «Las van a ver en en las rutas. Lamentablemente ahí van a morir muchísimas porque las que no logran alcanza una altura determinada son atropelladas por el tránsito vehicular», sostuvo. «Los que van a estar más preocupados son los dueños de huertas, en especial de huertas con crucíferas (repollo, coliflor, brócoli). Estas mariposas ovisponen (colocan huevos) en estas plantas. Cuando nacen las orugas se alimentan de ellas. Por eso, el paso de esta migración puede llegar a afectar a cultivos hortícolas», señaló. «Un año más, les recomiendo disfrutar de este fenómeno que no se da siempre», concluyó.