El Alzheimer, la forma más común de demencia, afecta a más de 55 millones de personas en todo el mundo. A medida que la población envejece, esta enfermedad neurodegenerativa está cobrando cada vez más relevancia, lo que impulsa a la comunidad científica a dedicar grandes esfuerzos en la búsqueda de tratamientos efectivos. En los últimos años, se han desarrollado varios fármacos que han mostrado un potencial significativo para cambiar el curso de la enfermedad. Entre ellos, destacan el donanemab, remternetug y blarcamesina, cada uno con enfoques únicos en su administración y mecanismos de acción.

Donanemab, desarrollado por Eli Lilly, es uno de los fármacos más recientes que ha despertado un gran interés en la lucha contra el Alzheimer. Este medicamento es un anticuerpo monoclonal que se dirige específicamente a los depósitos de beta-amiloide en el cerebro, una de las principales características patológicas de la enfermedad.

Los resultados indican que donanemab podría no solo ralentizar el deterioro cognitivo, sino también mejorar la calidad de vida de los pacientes, especialmente si el tratamiento se inicia en las primeras etapas de la enfermedad. Sin embargo, el requisito de visitas regulares a la clínica para las infusiones podría ser un inconveniente para algunos pacientes.

Remternetug, otro fármaco prometedor de Eli Lilly es remternetug, descrito como una inmunoterapia de segunda generación dirigida al amiloide. Aunque comparte su objetivo con donanemab, remternetug incorpora mejoras que podrían ofrecer mejores resultados y menos efectos secundarios.

Una diferencia clave radica en su método de administración. Mientras que muchas inmunoterapias actuales requieren infusión intravenosa, remternetug está siendo probado para su administración mediante inyecciones subcutáneas. Un método más conveniente que se asemeja al uso de plumas de insulina para la diabetes.

Este tratamiento está destinado a personas con Alzheimer en etapa temprana y, si los ensayos clínicos confirman su eficacia, remternetug podría convertirse en una opción preferida para los pacientes debido a su administración simplificada para la salud.

Blarcamesina, desarrollado por Anavex Life Science Corp., blarcamesina adopta un enfoque diferente al de los tratamientos dirigidos al amiloide. Este fármaco actúa sobre el receptor sigma-1, que juega un papel crucial en la prevención del plegamiento incorrecto de proteínas. Un proceso que conduce a la formación de depósitos de amiloide y tau en el cerebro, característicos del Alzheimer.